Se
denomina “mobbing maternal” al acoso sistemático contra las mujeres
embarazadas. En este tipo de acoso, el objetivo principal no es la eliminación
ni la destrucción de la víctima, que hasta el momento de quedarse embarazada
podía ser una trabajadora bien integrada en el grupo y no considerada
amenazante por el acosador. El objetivo que el acosador (normalmente es el dueño o jefe de la empresa) busca con el
mobbing maternal es ejemplarizante. Es decir, con el acoso a esa mujer
embarazada quiere que todas las demás mujeres de la empresa sepan lo que pueden
esperar si cometen el “error” de quedarse embarazadas y no se atrevan a
hacerlo. A pesar de que no se busca la eliminación o destrucción de la víctima,
por desgracia, las consecuencias físicas y psicológicas aparecen igualmente.
Este
tipo de acoso atenta directamente contra la libertad de elección de muchas
mujeres, que no pueden elegir quedarse embarazadas sin ver peligrar su puesto
de trabajo o sin ser sometidas a humillaciones y malos tratos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario